miércoles, 17 de diciembre de 2008

Vivir Para Dejar.

Alicaído despertaba cada mañana en el rincón de esa árida habitación, olisqueando con inusitada profundidad su apopléjica consciencia, y las gotas de sangre en ella.

Lavó sus manos por más de mil veces.

Regurgitó las más reverberantes trizas de lo que parecía ser el brillo culposo de su alevosa fascinación por algo que sólo podía denominarse como alguna extraña perversión.

Vociferó y clamó con sus pupilas apuntando inequívocamente a las alturas por divina absolución.

Cavó en lo insondable del lúgubre solar donde sostenía las raíces del manzano para así depositar en el parque del olvido los rastros de un pretérito bien definido.

Su dicotómico camino ya estaba marcado, en un rumbo de una vía, sin salida, sin embargo intento seguir viajando entre telarañas y recuerdos distantes, ambiguos y con destellos de afectos constreñidos en algún lugar de sus entrañas, que ante tamaño ahínco no pudieron más que esparcirse por el pavimento, y servir de manjar a las bestias, tal como alguna vez expresó "como un perro, como un perro".

domingo, 9 de marzo de 2008

This Is Not A Drill

Quiero empezar aclarando algo: "This Is Not A Drill".

Efectivamente, porque los últimos días de mi vida fueron lo suficientemente remecedores como para ajustar los acontecimientos a la escala de Richter y Mercali, tan nombradas en un país tan sísmico, o en su defecto, paranóico como el nuestro; y además, porque las cicatrices que dejaron calaron con inusitada profundidad en gran parte de mi testa. Ahora bien, lo importante de una tragedia en un principio es, o por lo menos para mi fue el acto de reconocer los daños causados por el vendaval, pesquizar cuanta sangre se había perdido y además, recoger los fragmentos de recuerdos y sentimentalismos esparcidos en el sitio del suceso. Luego, y tras un corto tiempo viene el periodo más activamante inactivo del proceso, al cual quiero apodar como "Banco De Arenas Movedizas". Luego de haber recorrido todas las partes, recogido todas las piezas, y asumido la pérdida, se comienza una cruzada absurda, y te dispones a realizar acciones para recuperar lo perdido, para abrir paso a un nuevo periodo, pero mientras más tratas y te mueves al ritmo de las ansias, la desesperación y la disforia, más te hundes e inmovilizas en el proceso. Acto seguido: caes de lleno en un estado de vegetación, en el cual sólo tienes tiempo de pensar en "cuán mala ha sido tu vida" y otros lamentos bastante rebuscados los cuales sólo forman parte de un vulgar acto de generalización poco discriminativa, que sólo busca crear aún más tormentas en las pestañas y temblores corporales. Al tiempo, y sin importar que en el camino se vean luces de mejoría, te encargas de alterar el paisaje y ver todo gris, opaco y tornar hasta la más mínima experiencia en fantasmas y ecos del suceso motor del proceso. Es así como terminas en un hoyo sin salida aparente. Sin dudas estoy omitiendo la parte vital de la tragedia: "El Darse Cuenta".

¿Darse cuenta de que?, esencialmente de tres o cuatro cosas suficientemente obvias como para ser omitidas, pero no por eso de poca relevancia.

Primero: Nunca has estado en un banco de quicksands, ni siquiera cerca, sino que te encuentras sentado de frente con una pantalla luminosa que sólo busca encandilar y gastar algunos conos.

Segundo: Mientras has estado ocupado tratando de bajar lo más posible la guardia y autoflagelarte, han pasado muchos sucesos de evidente importancia. Hay gente que insistentemente intenta de tirarte sogas, e incluso de bajar hasta donde estas sólo para ayudarte, hay gente que siempre estuvo ahí, sin que te dieras cuenta.

Tercero: Complementariamente a la bondad y presencia de los mencionados arriba, te das cuenta además que hay gente que ni siquiera se entera de lo que sucedió, y sólo gastan sus esfuerzos en preocuparse de alimentar su propio festín, del ego por supuesto. En cuentas resumidas, te das cuenta que hay gente que "No vale la pena".

Finalmente, y lo más importante: Dentro de todas las personas antes mencionadas, existe una que siempre prometió estar ahí, en todo proceso, en todo vaivén, y pese a lo dificil que puede ser, extendió los lazos a distancia, fortaleció el corazón, y estuvo dispuesta a sacrificar todo por sólo tomar un pincel y esbozar una sonrisa en tu rostro.

Gracias a esa sonrisa, es que estoy nuevamente de pie.

KSL.

jueves, 15 de noviembre de 2007

Pónlo En Mis Zapatos.

La primera vez que sentí que alguien pudiese transmitir a través de vibraciones algo más allá de lo común fue un 15 de marzo de 1968, mientras la ciudad reposaba bajo la lluvia. El encendió un cigarrillo y nos dijo: "dicen que los lentes de las cámaras roban almas". Todos reímos, y hicimos caso omiso al comentario, pero repitió de forma más enérgica: "sería ideal si desconectan esa basura, es como si sintiese oscuras vibras sobre mi". Algo importante iba a suceder y decidí no apagarla, y sólo fingir que ya no estaba allí.
Lentamente comenzó a aproximarse a su destino, y tomó con inusitada suavidad ese instrumento, como si hubiese un compromiso implícito flotando entre ellos. Claramente sostenían ese vínculo. Se soltaron las primeras notas al aire, pero él hizo un espacio para comentar lo que había pasado la otra noche y encendió el segundo cigarrillo, mientras el primero aún se consumía en el piso. Siempre tuve plena consciencia que él era de esas personas con la extraña habilidad de irradiar sin siquiera notarlo, como un don no explorado, pero muy bien desarrollado, sin tenerlo en mente. El magnetismo de aquella sala acromática nos sumergió en un estado de somnolencia placentera, como los cinco minutos antes de entrar en mundos oníricos. Comenzamos a flotar entre la sala, mientras él, tal como en el diván comenzaba a contar su des-amor, a mostrar que pese a sus vestimentas, y a su sonrisa inagotable, sentía como la vida se acababa, y como el mundo estaba cercano a dejar de sentir esas vibras que desplazan lágrimas de placer por cada centímetro cúbico de sangre que corre eufóricamente a través del inconsciente colectivo que oscila sobre nosotros.


domingo, 4 de noviembre de 2007

Algoritmos!

Nos sentamos a cada lado de la verdosa banca y nos pusimos a jugar a decirnos la verdad. Tu comenzaste, con palabras que saltaban con alevosía entre el espacio por donde se juntan tus labios. Yo por mi parte, escuchaba con inusitada calma, sin dejar caer ninguna de las palabras que escurrían por el borde de la banca. Llegó mi turno, y intenté dispararte a quema ropa, intenté hacerte caer de la banca, pero te mantuviste estoicamente en ella, como si tuvieras más cosas por decir.

Pensé que mis palabras pasaban sin cambiar el color de la banca, sin modificar siquiera una parte de tus facciones. Pero volviste a hablar, y lo hiciste sin titubear una sola vez, como si ya conocieses el desenlace de aquella historia, como si fuese un libreto de alguna obra teatral. En el acto, pasaste de la alevosía a la metáfora, a la metonimia y al silencio. Luego, derramaste unas lágrimas y yo sólo tuve tiempo para la ecolalia, para el decir sin decir nada, y para silenciarme.

Después de contemplarnos en silencio por largos minutos, nos levantamos de la banca, y caminamos, caminamos y caminamos, sin siquiera pronunciar una palabra. Comencé a caminar a unos pasos más rápido que tu, y de pronto desesperaste; rompiste la burbuja, comenzaste a disparar raudamente, y sin medir tus palabras, comenzaste a asumir que realmente sentías, que realmente querías algo en tu vida y que no podías permitir que avanzara un paso más, sin tomar tu mano.

Any Plans?!

me subo a la micro y le pago al chofer, mientras le pago al chofer intento no perder el equilibrio, mientras esté en equilibrio todo bien, camino buscando un asiento, lo veo y me siento, me siento bien, muy bien, desde hace algun tiempo que me pregunto si son las casas o las micros lo que se mueven... todo pasa muy rápido.
Primer paradero, bajan dos, suben tres, un tipo alto se para y comienza a hablar: "no es mi intención molestarlos señores pasajeros, damas y caballeros, estudiantes, sino ofrecerles una oferta única en el mercado, este increible libro de cocina chilena, ademas de este recetario de tragos y cocteles a sólo la modica suma de quinientos pesos... escucho y escucho, pero no esta entre mis planes comprar, y menos cocinar. Ahora que pienso, ni siquiera tengo planes, y menos algo planeado, asi que debería pensar en uno, uno muy bueno, no lo sé, ya lo sé: me levanto, un paso y luego el otro, levanto la mano, tiro la cuerda, se abre la puerta y ya estoy afuera.

domingo, 21 de octubre de 2007

Spirits!

La lluvia agotó el calzado que llevaba puesto, y mientras seguía el paso a paso, sentía una molesta filtración en la esquina de mi pie derecho. nada podía hacer, sólo seguir, caminar para poder alcanzarte. En algún momento todo se hizo lo suficientemente difuso como para pensar en dejar todo a un lado del camino y sólo estirar mi cuerpo y caer sobre la grama humedecida.
De todas formas, nunca fué una opción congruente; más bien parecía un pretexto para hacer todo más fácil. Pero continuamos, seguimos viéndonos las caras, acariciando cada corpúsculo de nuestra inmensa esfera, abrazando cada centímetro de amor, que hasta ese tiempo estuvo oculto en sólo miradas y roces que hacían parecer que algo grande se aproximaba. Se aproximó tanto, que fue cuestión de esperar a la ocasión propicia para que los efluvios de sentimiento se volcaran en la expresión primera de un amor incontenible.
Ese primer beso, multiorientado, horizontal y vertical al mismo tiempo, fugaz, espontaneo... ya va un tiempo desde aquello, y sigue siendo una hermosa modificación de la repetición de aquellos, pero el efluvio sigue aumentando su caudal.

miércoles, 10 de octubre de 2007

Animad-versión!

volvimos a vernos las caras, volvimos a sonreír, volvimos a caer en el juego,
volvimos a gritar por las calles, volvimos a vivir el amor, volvimos a subir a los cielos,
volvimos a la antigua versión, a la versión loca, romántica, atrevida, rápida, destellante, multiplicada por cien, por mil, y por un millón de años luz por sobre los demás.
volvimos a escribir, por sobre cualquier proceso que involucre pensar, y sólo es necesario volcar las letras en un papel, en un borrador, o en las teclas de la remington para poder saber que los pensamientos no existen, y sólo la sencillez del fluir del sentimiento puede ser catalogada como una buena manera de vivir, de sentir, de reír, y de seguir con la misma versión de la melodía. do, re, mi, fa, sol, la, si, do.

Obliteración.

quisiera hablar muchas cosas hoy por hoy,
creo que es mejor callarlas y esperar,
esperar a que esto crezca, y se marche por si,
después de todo, las mareas pasarán, y la suave y cálida brisa que se vuelve reberverante nos inundará, y el fulgor de nuestros cuerpos, de nuestras almas, nunca sucumbirá ante la preciosa vista de los ojos estumecidos del falso amante, del eterno asechador, de una mentira corporea, de un engaño latente y de palabras testarudas que nada saben lo que es el sentimiento, y sólo tienen manos cercenadas para aceptar el reflejo de brisas hedonistas, llenas de autoadoración cautiva y necesaria para saciar a los demonios, destellos y brillos de un alma putrefacta, maquinada e inservible, que al pasar los años, sólo encuentra pretextos para volver a caer.
una vez más, una puta vez más.

lunes, 27 de agosto de 2007

Metaescritura!

¿Escribir por escribir es escribir?
En parte sí, porque fluyen de manera reverberante las palabras más ocultas y volubles.
En parte no, porque los verdaderos escritores creen aún en las musas y los motores para apuntalar su escritura.
En parte si, porque entre las palabras y los puntos sobran los motivos.
En parte no, es que sin motivos no existe razón de vivir.

Realmente no creo que hayan más motivos de escribir que tan sólo vivir, o quizás debiese decir, mi único motivo es escribir.

Para escribir quizás no hace falta un lápiz, ni siquiera un mísero papel. Aún más, puedo prescindir del tacabo, del amor, del sufrir, de la guerra, de la lírica, de la voz, e incluso de mi testa, y aún asi poder escribir.

martes, 14 de agosto de 2007

Cáncer En La Hoja.

Y de forma repentina el cielo se cubrió de una extraña sensación dubitativa, un color gris verdoso lo teñía, y ella no podía esperar nada más que el fin de la exploración, asi que, colocando su cabeza entre las manos, dejó que la lluvia desintegrará su esquelético y pálido cuerpo.
Mientras tanto, él, reposando en una hamaca firmemente atada a dos grandes álamos, intentaba batirse al son del viento incesante que corría ese día de locura extraordinaria.
Al salir de su periodo del baile hipnótico de aquella tela, quizo saber en donde estaba ella, quizo sentirla entre sus brazos y decirle todas esas cosas que no había alcanzado a susurrar gentilmente en su oido.
Al entrar a la horrible cabaña, y despues de hervir un poco de agua, comenzó con su ritual sagrado de las 3:00pm. Sacó la bolsa del envoltorio y con religiosa prolijidad la pusó en medio de la taza, la agitó y presionó tres veces con la cuchara, dejándola a un lado. Cuando paró de beber, sintió el gusto amargo y supó que algo sucedía, un sentimiento sobrecojedor lo abrumó totalmente, dirigió su mirada a la tazá y vió el rostro rodeado de dos manos.
No descifró el lugar, pero corrió desesperadamente a la orilla del lago, lugar que dió como primera opción. pensó en el mal que le había hecho, en todas las cosas que no había dicho, pensó en su cuerpo, penso en su alma, luego, la vió tendida sobre una roca, la tocó, la sintió fria, un poco distante, pero estaba allí, aún respirando, y pese al déficit de aire que tenía, lo miró a los ojos y le dijo; "nos falta camino por recorrer".
"Claro que el camino se acorta, con las temporadas estivales desapareciendo de mi mente, mientras la lluvia, tan ácida como las lágrimas que deberían estar muriendo a mi lado, nos azota con una furia inusitada", dijo la señora, cubriendo bajo su falda al pequeño. Y tras limpiarle la nariz, recordó:
"Parecían ligeras las advertencias sobre la hecatombe que llegaría. Parecían largos los días alegres en que caminabamos juntos, hijo mío, sin pensar un instante en que las nubes nos arrojarían balas fulgorosas y adoloridas".
Y así, nuevamente emprendieron la marcha, aplastando las últimas hojas que ese árbol desnudo dejaba caer.


Vivir El Engaño.

Al comienzo pensaste en no tomar la opción políticamente correcta, pero con el paso del tiempo piensas día a día en porque apresuraste el camino y decidiste partir por lo más fácil, error que hasta la fecha no puedes alejar de tus sucios pensamientos.
Ideas que rondan tu tamaña cabeza, que por lo demás esta al tope de ellas.
¿Te crees mucho?! ¿Te crees nada?! ¿Acaso te crees algo?!
Muchas expectativas a tu alrededor, ilusiones devaluadas, deseos irrealizables y bolsas de basura. risas y llantos a tus espaldas, todos llenos de ficción, de irrealidad, de mentira, todo tu mundo lleno de muerte, ¡¿y tu?!
Vivo y muerto al mismo tiempo; sólo queda en pie la fachada..

martes, 24 de julio de 2007

Semana Predictiva.

Todo comenzó a los siete años.

Me encontraba recostado sobre la misma cama donde ahora escribo mis memorias, pensando en como sería la vida en unos años más.

Fue en ese instante donde caí en el primer sueño de mi vida, algo difuso, pero podía distinguirme, distinguir lugares y olores, e incluso mantuve un largo diálogo con una mujer. En ese primer sueño tenía 26 años, y curiosamente vivía a la orilla del mar, un puerto.


A la mañana siguiente, resté importancia a dicho suceso como tal, y sólo me atreví a contarle a mi abuela que había soñado en mi vida futura. Pase el día jugando en el patio de mis tios, todavía recuerdo, jugando en un frontón, preocupado de nada, como solían ser esos días. El cansancio después de unas horas se apoderó de mi cuerpo, y no pude hacer nada más que recostarme y dormir. Durante seis noches seguidas continué viajando entre redes oníricas, develando parte de mi futuro, aunque nunca lo creí como certeza, sólo como un inocente juego de un niño de siete años.

El tiempo corre rápido, y de pronto, comencé a figurar el rostro de aquella mujer, comencé a darme cuenta que vivía en una ciudad a las orillas del mar, que me sentía profundamente feliz, y que todo, y cada parte de lo que soñé durante esa semana forma parte de mi vida actual.


POLKA!

Temblor, sonrisa, temblor.
cosquilla, temblor, sonrisa.
sonrisa, temblor, cosquilla.
si te busco, probablemente te encuentre.
si me buscas, estoy aqui, a tu lado.
el sol brilla nuevamente en nuestros ojos,
y precindiendo del sol, nuestros ojos brillan cuando somos uno.
temblor, sonrisa, temblor.
cosquilla, temblor, sonrisa.
sonrisa, temblor, cosquilla
temblor, sonrisa y amor.